Este tipo de tatuajes tienen un fin específico: cubrir viejos tatuajes que ya no quieren verse en el cuerpo por diversos motivos. Nombres, símbolos o dibujos mal hechos son a veces tapados por tatuajes que mejoran y embellecen determinadas zonas del cuerpo.
Un tatuador profesional está en posesión de los conocimientos para saber tapar con elegancia el tattoo que ya no se desea. Este puede disimularse de varias maneras, aunque siempre debe procurarse tomar los elementos del antiguo dibujo que pueden aprovecharse, e intentar eliminar el resto con degradación de color u otras técnicas.
Acentuar las líneas del nuevo diseño, combinar eficientemente los colores y formas... solo experiencia y cualificación pueden proporcionar la seguridad de que cubrir un tatuaje dará un resultado excepcional.